20/3/09

ANÀLISIS DEL REGGETÒN “A FUEGO”.


(DON OMAR)

Temática del texto:

Don Omar, supuestamente habla de una mujer hermosa de ojos verdes, pero al mismo tiempo la animaliza, dándole una interpretación diferente a la realidad. Ve a la mujer como la protagonista de la canción. Esta es el modelo femenino que de manera agresiva, impulsiva y libre promueve al sexo y la violencia, sin ningún tipo de ataduras. Del otro lado vemos al hombre, que observa a la mujer en sus actitudes y donde éste juega un papel importantísimo en la vida de ésta, es quien controla la acción en el escenario con su patrulleo, donde se mueve y desenvuelve la mujer. La protagonista del regatón se mueve en medio de la ciudad, promoviéndose de una forma agresiva y sensual, dando una idea perfecta del sexo y la agresividad, pero quien compra este sexo el propio hombre, quien a su vez es quien la suple, la llena de placer.






ÀMBITO A QUE CORRESPONDEN LAS PALABRAS



Es un estilo de palabras usadas por los jóvenes postmodernos del siglo xxi en América Latina, especialmente en países caribeños.


Aunque con poca elaboración literaria, este se basa en la rima para lograr que las letras sean pegadizas y de fácil acogida al público, dándole un eco a cada palabra pronunciada a través de la repetición. Con su léxico cargado de modismos populares lleno de melancolía y jocosidad, obtiene un sentido amoroso y sentimental. El público que consume en nuestro país este género, son mayormente los jóvenes de sectores barriales de la ciudad, pero no sin ocultar que su popularidad ha escalado a todas las clases sociales, aunque con menor acogida.












CONDUCTAS QUE PROMUEVE EL DISCURSO


La imagen de la mujer nos da la idea clara de que la canción narrada desde un punto de vista masculino somete al machismo. Las relaciones sexuales infieles, marcado por la físico, prometen una felicidad momentánea, gozar hoy, ahora. La mujer discriminada, animalizada, brutalmente rebajada a la categoría de placer, no se busca una pareja para construir un hogar, solo interesa el momento. El cuerpo bien estructurado de la mujer junto al ritmo son los elementos esenciales en las relaciones sexuales.


Por otro lado la violencia en la mujer incita al sexo y la liberación femenina. Las letras son una muestra de las vivencias por parte de los jóvenes en los barrios de las ciudades, del lenguaje callejero, lleno de significados que aluden a las relaciones sexuales, violencias y asesinatos.






OPINIÒN CRÌTICA:


Creo, que escribir un regatón como “A fuego”, el autor tendría que haber vivido de una u otra forma en relación con la realidad circundante existente en los barrios de las ciudades de su país. El impacto que crea este regatón en nuestra sociedad al promover ideologías que como la liberación femenina y el machismo, siempre están en total desacuerdo es desastroso. Además promueve el sexo de manera escandalosa y vulgar por parte de la mujer, trae serios enfrentamientos en una sociedad acostumbrada a pregonar la potencia sexual masculina.


Don Omar vocifera a los cuatros vientos el rompimiento de parejas en la putrefacta sociedad que habitamos, incita al sexo y la violencia. Aquí surgen hechos escandalosos en todo el proceso narrativo, con un recorrido que nos sumerge en las relaciones sexuales momentáneas y a las violencias callejeras, que vivimos en el caribe.




Con sus repeticiones de palabras nos da cierto ritmo y jocosidades que son únicos en su género. Su tema es insinuante, provocativo hacia el sexo, la liberación femenina y la conquista territorial, como una forma de introducir su texto en la sociedad.



GROSARIO



A FUEGO: Algo que está de moda. Algo muy bueno referente al sexo o de alguna batalla verbal entre dos personas.

GATO(A): Muchacho(a).


GANGSTER: Mafioso(a).


REBULEO: Pelea o discusión entre personas.


CAMPEO (A): Una persona que busca problemas.


VELAR: patrulleo, observar, montado en un coche con los cristales tintados. Hacer centinela o guardia.

CANGRI: se dice de persona que está bien rankiao, que es jefe, que es mafia.

RANKIAO: ser persona de gran respecto en el mundo de la música.

JANGUEAR: salir con el grupo de amigos.

PEGADO: una persona famosa.

CASERÌO: son lugares donde vive gente pobre, prostituciòn y especialmente punto de drogas.

DE CORA: de corazón

PEINES: cargadores de pistolas.

PACAS: billetes, dinero.


PERCE: de persecución, sentir como que le siguen, sentirse observado.

ZORAR: asustar.


DEMORAR: detenerse en una parte.


SOCIO(A): mejor amigo(a).

SUAVENA: magnifico, excelente.

NENE: terminación de cariño para personas de más edad, sobre todo en la terminación femenina. Novio.


JODER: para expresar enfado, irritación, asombro, etc.
“El Modernismo en la Poesía cubana”, según Pedro Henríquez Ureña.
(Santiago Terrero)

Según nos narra Pedro Henríquez Ureña en su ensayo crítico, “El Modernismo en la poesía cubana” con fecha de 1905, dice que Marcelino Menéndez Pelayo, critico de la literatura española e hispanoamericana, miente en su prólogo a la “Antología de Poetas hispano-americanos, de 1893, cuando éste decía que la literatura cubana era la menos influenciada por el modernismo de la literatura española y que Menéndez Pelayo lo hacía quizás porque sentía resentimientos o enojos por tradiciones ideológicas con la literatura cubana.

Aclarando lo anterior Pedro dice que la literatura cubana es la más española de todas las cis-atlánticas o sea que la literatura cubana llega más allá del atlántico.

Decía que en los años anteriores a la ultima guerra cubana, poetas pocos conocidos para la época como José Martì, Julián del Casal, Nicolás Heredia, Manuel de la Cruz, poseían un verdadero espíritu modernista y que por ser partidarios de la revolución cubana, no fueron estables ni permanecieron mucho tiempo en su país. Aunque después de lograda la independencia cubana, durante su corta presencia de éstos se formaron algunos discípulos sobresalientes, pero no con la calidad descriptiva y versificadora de Julián del Casal y José Martì.

Pedro dice que la causa que influye en la casi extraña y total desaparición del estilo modernista en la poesía cubana es que los libros se publican de tarde en tarde o sea de vez en cuando o a veces y donde las revistas son exiguas, o sea que son insuficientes, escasas y reducidas. Donde la influencia modeladora ejerce epiritu peninsular o sea que la literatura cubana debía hacer cambio de acuerdo a lo establecido en los parámetros de la literatura española.

Dice que no hay otra causa que la influencia pervadente, participo presente de pervadere (italiano), que en español significa difundirse, extenderse por, penetrar de la literatura española como la moderadora de la desaparición del estilo modernista en la poesía cubana.

Pedro admira la capacidad creadora de Julián del Casal y José Martì que junto al nicaragüense Rubén Darío y el mexicano Manuel Gutiérrez Nàjera, fueron los iniciadores del modernismo en la poesía americana. Donde Julián del Casal, pesimista o lleno de imperfección, juzgando las cosas por el lado mas desfavorable, no era un maestro de ideas, estaba limitado a la enseñanza, pero digno de admiración, con una narración descriptiva y un arte de versificar rítmico, dejó un grupo reducido de discípulos que jamás lo igualan en calidad, fueron estos las hermanas Juanita y Dulce María Borrero y los hermanos Carlos y Federico Uhrbach, quien era un modernista correcto y espiritual, que merece honor por ser el único entre los poetas cubanos consagrados o reconocidos, que sostiene el estandarte de su secta, o sea el único que ha mantenido la insignia de su ideología, seguidos por los poetas René López, con “Barcos que pasan” y Juan Guerras Núñez, con sus poemas “Anhelos”, “Cantábricas”, “Salambò”, y “Tristeza del invierno”. En cambio dice Pedro que a José Martì cabría señalarle un discípulo tras mucha requisa (revista o inspección), que es Félix Callejas, que lo ha imitado con sus poesías, “Cuadro de Sombra” y “Armas y espigas”. En ese mismo párrafo Pedro dice que Marti, cuya figura de apóstol ha eclipsado (ocultación

total o parcial) en Cuba su gran figura de escritor y ha hecho olvidar la del poeta, para referirse que a Marti sólo se le conoce como héroe y no como escritor.

Bonifacio Byrne y Manuel S. Pichardo a quienes Pedro ve con espíritus modernistas, quienes abandonan por el género épico y por el casticismo respectivamente, dejando a un lado la poesía cubana. Pedro termina diciendo que la poesía cubana puede ser anticuada por su estilo, pero que las ideas siguen fluyendo y que están bien definidas, con una filosofía avanzada, donde las nuevas generaciones traerán un caudal de ideas y cosas significativas a la nación cubana.







































18 de marzo de 2009

Viajes y cargos de Pedro Henrìquez Ureña

Viajes y cargos de Pedro Henríquez Ureña.
(Santiago Terrero)

Según nos narra Juan Jacobo de Lara, en “vida y obra de Pedro Henríquez Ureña”, después de la muerte de Salomè Ureña, ocurrida el 6 de marzo 1897, Pedro viaja a Cabo Haitiano (Haití), bajo el cuidado de su padre, el cual ejercía la profesión de médico allí. Desde entonces se comienza a ver el ensayista, cuando con apenas quince años, Pedro escribe un artículo en un periódico manuscrito, condenando al gobierno de Lilís, después de su muerte.

Al regreso de Francisco Henríquez (Don Pancho) a Santo Domingo, Pedro forma parte de un grupo de jóvenes con aficiones literarias y organizan revistas juveniles, en donde comenzó Pedro a publicar sus crónicas, impresiones criticas y algunas poesías. Se graduó de Bachiller en Ciencias y Letras, en Santo Domingo, el 6 de febrero de 1901, el 19 de febrero parte a la ciudad de Nueva York, donde hace estudios del idioma inglés, escribe poesías y prosas y trabaja en el comercio durante tres años.

En el 1904, al establecerse Don Pancho en Santiago de Cuba, Pedro deja a Nueva York y se radica en La Habana, donde consigue empleo en la casa Silveira y Compañía, recomendado por Máximo Gómez. Este año fue fructífero para Pedro, escribió y publicó crónicas habaneras, bajo el seudónimo de León Rock, ensayos, artículos de críticas y poesías en la revista Cuba Literaria la cual dirigía su hermano Max desde Santiago de Cuba.

El 7 de enero de 1906, se traslada a Veracruz, donde trabajó como director de El Dictamen y lanzó a la publicidad la Revista Crítica. Luego sigue a la ciudad de México y forma parte del cuerpo de redacción del diario El Imperial y de un grupo de jóvenes escritores, poetas, artistas y estudiosos, donde se le clasificaba como el Sócrates del grupo. Pedro abandona la redacción de El Imperial, pero sigue colaborando con otros periódicos y revistas literarias y conjuntamente trabaja en una compañía de seguros.

En 1911 Pedro hizo un viaje rápido a Santo Domingo con escala en La Habana de ida y vuelta y se reúne con Max antes de volver a México, donde ya era Oficial Mayor de la Secretaría de la Universidad Nacional de México, cargo que ocupó de 1910-1914; conjuntamente ayudó a organizar la Escuela de Altos Estudios y ocupó la cátedra de literatura inglesa en 1911; Profesor de la lengua española en la Escuela Superior de Comercio y Administración en 1912; Catedrático de la literatura española e hispanoamericana en la Escuela Preparatoria de la Universidad Nacional de México, de 1912-1913; Catedrático de literatura inglesa y de historia de la lengua y literatura española en la Escuela de Altos Estudios de la Universidad Nacional de México, de 1913-1914. En 1914 termina la carrera de abogado en la Escuela Nacional de Jurisprudencia de la Universidad de México, con su tesis “La Universidad”, pero situaciones políticas lo obligan a salir de México sin recibir su título y se establece en La Habana, Cuba, hasta finales de 1914, para luego seguir hacia Estados Unidos como corresponsal del Heraldo de Cuba, desde la ciudad de Washington, donde escribe con el seudónimo de E.P. Garduño, cargo que ocupa hasta 1915. Sus visitas eran constantes a la ciudad de Nueva York, donde se instaló y entró a formar parte de la redacción del semanario Las Novedades, donde escribía críticas de artes y de literatura.




El 27 de septiembre de 1916, va a Minneapolis nombrado como Professorial Lecturer en el Departamento de Lenguas Romances de la Universidad de Minnesota, donde enseñaba español, literatura del siglo xix e historia de la civilización española e hispanoamericana. En este mismo año se inscribe en la Escuela Graduada de la misma Universidad para obtener el grado de “Master of Arts”, en 1917 presenta su tesis en inglés, la cual no espera recibir el diploma por apresurarse a la ciudad de Nueva York, para conseguir el pasaje para viajar a Europa, con el objetivo de pasar el verano en Madrid, donde trabajó con el objetivo de compilar datos para su tesis de doctorado, junto a Alfonso Reyes, en el Centro de Estudios Históricos, que dirigía Ramón Menéndez Pidal, donde hizo amistad con Tomás Navarro Tomás, Américo Castro y Antonio Solalinde; además, hizo traducciones del inglés para la Biblioteca Nueva de Madrid. En septiembre regresó a Minneapolis e inició su cátedra y estudio de su doctorado, donde solicitó permiso para escribir nuevamente su tesis en español, con el titulo de “La Versificación Irregular en la Poesía Castellana”.

Al volver a México en el 1923, aumentó su producción como escritor, sobre todo en crítica teatral para “El Mundo”, de México con la firma de “Gogol”, y desempeñó el cargo de Director General de la Enseñanza Publica en el estado de Puebla. En 1924 se va a La Plata, por razones políticas ocurridas en México, regresa junto a Isabel Lombardo, su esposa y su hija Natacha de apenas tres meses de nacida, donde enseñó en el Colegio Nacional de La Plata y dictó cátedras en la Universidad de la Plata. En 1930 se traslada a la ciudad de Buenos Aires, donde enseñó literatura argentina, americana y europea en el Instituto de Filología de la Universidad de Buenos Aires, desplazándose a las ciudades de Chile y Uruguay a dictar cursos y conferencias.

El 15 de diciembre de 1931 se traslada a Santo Domingo, donde el gobierno lo nombra como Superintendente de Enseñanza, desde donde dirigió la Revista de Educación. Fue catedrático de la Universidad de Santo Domingo, donde también fundó la Facultad de Filosofía y Letras.

El 29 de Junio de 1933, Pedro cumplía 49 años, su esposa e hijas se encontraban en París, condiciones que aprovecha para salir del país huyéndole a la dictadura, a través de una licencia solicitada al gobierno. A su llegada a París, emprende su viaje nuevamente a Argentina, donde siguió su magisterio en el Colegio de La Plata. En 1938 se organiza en Buenos Aires la Editorial Losada, donde fue director técnico.

Fue llamado por la Universidad de Harvard, Cambridge, Massachussets, EE.UU., a recibir la cátedra Charles Eliot Norton, durante los años académicos 1940-1941, donde fue a enseñar literatura hispanoamericana. Antes de partir a Buenos Aires, visitó a Boston y Nueva York. Regresó a Argentina en abril de 1941, para solo viajar de Buenos Aires a La Plata, hasta el día de su muerte ocurrida en un tren, el 11 de mayo de 1946.




13 de marzo de 2